domingo, 16 de agosto de 2015

Espada para Tropa de Dragones, "modelo" 1768 (I)

Antecedentes Históricos:
El cuerpo de Dragones fundado a mediados del siglo XVII, aunaba en su concepto las ventajas de la infantería y caballería, en lo que algunos autores han descrito como “Infantería montada” o “Caballería a pie”. En sus orígenes, fue dotado con el denominado “sable corvo” como así podemos comprobarlo en la Real Orden de 12 de julio de 1728, cuyo texto al tratar de las espadas que ha de usar la Caballería, hace perfecta y clara distinción entre las espadas de un cuerpo y los sables del otro.
En cuanto a la espada de Caballería cita de la siguiente forma, y al sable de Dragones a continuación:

"...deben ser uniformes en todo a las de nueva fábrica, sin que ningún Regimiento
ni Compañia, se aparte de su forma, medida y peso..."
 "...los sables de Dragones serán del mismo modelo, peso y medida de los que al 
presente usan..."

Clonard por su parte, indica que los Regimientos de Dragones, usan de "sable corvo" en 1703, volviendo a citar que en 1743, se hace más curvo aún si cabe.
Por su parte, el Coronel García Ramírez de Arellano, en su "Instrucción métódica y elementall para la táctica, manejo y disciplina de la Cavallería y Dragones" de 1767, también hace referencia al uso del sable curvo frente a la espada en dicha fecha, ahora bien dada su dilatada experiencia en la cual afirmaba que los Dragones eran principalmente cuerpo montado, aconsejaba el cambio a la espada recta en la siguiente forma:

"... será mucho mejor que fuese recto, para que tuviese toda la fuerza, ofensa y manejo que la espada..."

y en cuanto a su guarnición:

"...La guarnición havia de ser de latón dorado, pues la experiencia me
ha hecho de ver, ser de más duración y más fácil mantenerla limpia..."

    
Espada para Tropa de Dragones modelo 1768


Es posible que las recomendaciones hechas sobre el uso de la espada recta por los veteranos oficiales de Dragones, diesen lugar a que, a mediados del siglo XVIII, el rey Carlos III aprobase, o al menos autorizase el uso de las mismas en los Regimientos de Dragones, lo que produjo un cambio paulatino en el armamento portátil del cuerpo.

No debemos olvidar la orden emitida por el Marqués de Esquilache,- Ministro del rey Carlos III- Dicho texto, conocido como Documento Fundacional de la Fábrica de Toledo conservado en el archivo de Simancas, fechado en junio de 1761 y cuyo exhaustivo título : "Método para la Fabricación de Espadas de Toledo, peso de los materiales que se han de emplear en cada hoja, qualidad del acero, modo de  amolar y dar el temple, defectos que se han de evitar, marcas y señaas que ha de tener cada hoja, precauciones para el acicalado, y pruebas que se deben ejecutar para su aprobación" describe de forma precisa los tres modelos de espada que debieran usar los cuerpos de Caballería, Dragones e Infantería del momento.

En el magnífico artículo de nuestro amigo y colega investigador, Juan José Pérez, se resume de forma precisa las características morfológicas de cada una de ellas en base a dicho documento.
Volviendo de nuevo al documento de 1761 y en el aspecto que nos incumbe, es decir, la espada reglamentaria de Dragones, podemos comprobar como el Marqués de Esquilache, aboga, por no decir impone, la arquitectura de hoja recta, dotada de un sólo filo, al igual que la descrita para la Caballería, y lo más importante provista de un claro y perfectamente descrito recazo, del cual hablaremos más adelante.

"...La figura de la oja ha de ser como la de caballería, pero su
largo con recazo y espiga ha de ser de 3 pies, 2 pulgadas y 3 líneas, lo
que sale de oja de la Guarnición ha de tener 32 pulgadas,el largo 
del primer tercio  ha de ser 10 pulgadas y 8 líneas y el ancho en el 
principio del primero una pulgada y 3 líneas, el grueso del lomo 2 
líneas y media, el recazo ha de tener de largo 1 pulgada y 9 líneas, 
de ancho 9 líneas, y de grueso 3 líneas, el ancho del principio del 
segundo tercio una pulgada y 2 líneas, y en el principio del tercero 
una pulgada y una línea,la espada como la d Caballería y del 
mismo largo, el peso de la oja entre 18 y 20 onzas..."

Esta magnífica descripción en lo que sin duda se puede calificar como modelo de pleno derecho, deja claro la preferencia por la arquitectura de hoja recta frente al "sable corvo", y así lo promulga el Ministro en 1761, quizá haciendo caso de la experiencia de sus oficiales, como apenas seis años después publicase en su tratado el coronel García Ramírez de Arellano, como ya citamos anteriormente. 


Espada para Caballería según el diseño de García Ramírez de Arellano, 1767

La existencia concreta de hojas de espada rectas destinadas al cuerpo de Dragones en 1769 y 1776, ya aparece documentada por Brinkerhoff en su obra "Spanish Military Weapons in Colonial America 1700-1821", así como una importante colección de hojas de Caballería y Dragones, aparecidas en Louisiana, en las cuales la cifra real de Carlos III aparece troquelada, lo que confirma, su uso a finales de la década de 1760. Si tenemos en cuenta la orden emitida por Esquilache en 1761, y la recomendación de Ramírez de Arellano publicada -posiblemente de forma tardía- en 1767, podemos afirmar el cambio paulatino de la hoja curva por la recta en dicha década. 
Volviendo de nuevo al diseño, en cuanto a la guarnición descrita en 1761, en base a un modelo provisto de recazo, vamos a encontrar diferencias notables frente a la adoptada finalmente en 1768.

"... La guarnción se ha de componer de dos conchas de hierro 
pequeñas en una pieza,la interior de pulgada y media de ancho, la 
exterior mucho mayor, bien acoplada y que salga de ellas dos barre-
tas para cubrir la mano, que la una se una con la vuelta de la cruz 
pero sin soldadura, y la otra que se introduzca en el lomo. Las con-
chas y las barretas han de ser de una pieza, bien ímpias, templadas 
y sin soldadura. 
El pomo de chapa hueco que encaje en la madera, que ha de servir 
de puño que quede bien chato por la parte superior y que esté 
unido a una chapa que guarnezca todo el largo del puño, hasta 
introducirse en un anillo o birola que ha de concluir la parte infe-
rior de él.
El puño ha de ser guarnecido de cuerda sobre la madera y 
forrado en moqueta negra, y ha de tener de largo 3 pulgadas, los 
gavilanes que no sean cortos sino correspondientes, y así éstos como  
los brazos han de estar unidos por una plancheta que se ha de unir 
a la concha con los tornillos, la cruz de una pieza sin soldadura con 
el asiento doble de modo que se afianzen bien los cuatro tornillos, y 
será bien reforzada por lo más próximo de ella al recazo.
La baina ha de ser en todo como la de Caballería, de las mis-
mas circunstancias y refuerzos.
Toda la espada de Dragones montada ha de tener 3 pies, 2 pul-
gadas  y 2 líneas y ha de pesar desnuda ... y con la baina ..."

Como podemos ver por la descripción de 1761, la guarnición, montaría una hoja provista de recazo, a la antigua, en lo que nos recuerda las guarniciones de bronce de las escasas espadas de Dragones fabricadas en Barcelona, entre 1760 y 1780, principalmente en modelos destinados a la oficialidad, como es el caso del fondo nº 25.202 con punzones de Magí Closas y del gremio de Dagueros de Barcelona, depositado en el antiguo Museo del Ejército de Madrid - hoy Toledo- en cuya hoja podemos leer "por el Rey Carlos III" "Regto de Numansia" -pieza profusamente estudiada por mi- u otras de igual factura, citadas por Calvó en su obra, con inscripciones similares alusivas a los Regimientos de Pavía o Real Reina.
La posterior aparición del conocido como "modelo" 1768 con guarnición en hierro y hoja carente de recazo, fue el que finalmente se impuso, siendo prácticamente la totalidad de las conservadas de este modelo fabricadas en época de Carlos IV, como es el caso del ejemplar que nos ocupa. 

Una hipótesis a valorar a expensas de ver la Real Orden que aprobase el "modelo 1768", es que dicho modelo, pueda referirse realmente a las espadas de Dragones con guarnición de bronce y recazo, y no a las de nuevo diseño que tradicionalmente ha llegado hasta nuestros días, en parte debido a las láminas del Tratado de Morla, siendo éstas últimas una evolución posterior junto con la espada de Caballería de Línea, de nuevo diseño coincidiendo con la reaparición de los Regimientos de Dragones en 1805, ya que el nuevo ordenamiento de la Caballería en su reglamento de 1803, hizo desaparecer el cuerpo de Dragones, asimilando sus efectivos a los nuevos regimientos de Húsares y Cazadores englobados en la nueva Caballería Ligera, con lo que cesó la producción de su modelo de espada, equipándose éstos de nuevo del sable propio de la Caballería Ligera, pero su reaparición en 1805, devolvía la espada recta a los Dragones. -no debemos olvidar que ambos modelos "dragones 1768 y Cab. de Línea 1803, comparten la misma tipología de guarnición de hierro y hoja sin recazo-
Apoyando esta teoría, podemos comprobar en un documento conservado en el Archivo General de Simancas, referente a: "Escuadrón de Dragones de América en la Havana, Vestuario " fechado en 1787 (SGU,LEG 7255,6) donde se cita textualmente que las espadas de Dragones llevan guarnición de metal dorado.

"Sesenta espadas de montar con sus guarniciones de metal
dorado; las hojas, no alemanas ni de las vidriosas
que suelen descartar los cuerpos y rezagan los fabric-
antes para enbiar a América;..."

En dicho documento, se constata la guarnición de bronce en las espadas destinadas a los Regimientos de Dragones de América, en fecha de 1787, frente al supuesto "modelo" 1768 de guarnición de hierro. Además el texto dice claramente que se envíen espadas de calidad superior, siendo este detalle tan importante, que al finalizar el documento se insiste en ello:

"...Se ruega al mismo encargue en Barcelona (u otro parque donde se
construyan los menages que se tenga en consideración para todo, la advertencia pues-
ta en el renglón respectivo a hojas de espadas; por constar que en efecto los fabricantes
aplican a los Cuerpos de América confrecuencia los que les descartan los de Europa..."

Diseño del denominado sable recto para Dragones, según Ramírez de Arellano. 1767




El ejemplar que ilustramos:

La Espada de Dragones de nuevo diseño, está formada por una guarnición de hierro en forma de cazoleta de vela cerrada dotada de aro guardamano que junto con una rama de refuerzo asciende hasta la empuñadura y remata en un galluelo plano. En la cazoleta junto al arranque de la hoja, se aprecia la marca troquelada de un "D" (Dragones ??)
El puño de madera con junquillo de cáñamo y forrado de suela, posee una monterilla corrida que se afianza en una ancha virola dotada de aro de pulgar y rematada en una perilla de remache.

Tiene hoja de dos filos corridos a tres mesas en cuyos planos -grabado al ácido- podemos leer:

* D * Cs. IV *  (Dragones Carlos IV)
* Tº * 1805 *  (Toledo 1805)






"D" troquelada  (Dragones) ??
Dragones y Caballería Española. Hermanos Suhr /Tafelserie Col. marqués de La Romana 1807-08
Se aprecia sin ningún lugar a dudas las tipologías de espada existentes.
md. 1768 para Dragones y 1803 para caballería de Línea


* D * Cs. IV *


* Tº. * 1805 *




Laminas del Tratado de Artillería de Tomás de Morla, 1803

Longitud Total: 1050 mm
Longitud Hoja: 905 mm
Ancho de Hoja: 35 mm


Espada para Tropa de Dragones modelo 1768


Dragones de Pavía 1805  (Delfín M. Salas)


Regimientos de Dragones (conde de Clonard)


Dragones de Numancia (Ferrer Dalmau)

Bibliografia:

Otros ejemplares publicados en el blog:
-Espada para Tropa de Dragones modelo 1768 fechada en 1800

- Colección General de las Ordenanzas Militares, sus innovaciones, y aditamentos. Tomo 3 (comprende las Ordenanzas de 12 de julio de 1728) Libro 4, Título 7. / Madrid 1764
-Armamento Portátil Español 1764-1939. B. Barceló. Madrid
-Tres Siglos de Armamento Español. B.Barceló. Cala Millor. 2002
-Armamento Español en la Guerra de la Independencia. J.L. Calvó Madrid 2008
-Método para la Fabricación de espadas... Marqués de Esquilache. Aranjuez. 1761
-Tratado de Artillería para uso de la Academia de caballeros Cadetes del Real Cuerpo de Artillería. Tomo II. Tomás de Morla. 2ª Edición corregida. Segovia 1816
-Láminas pertenecientes al Tratado de Artillería que se enseña en el Real Colegio Militar de Segovia. tomo IV. Tomás de Morla, 1803
-Instrucción metódica y elemental para la táctica manejo y disciplina de la Caballería y Dragones García Ramirez de Arellano. 1767
-Fichas catalográficas Museo del Ejército de Madrid. A. Bernalte Sánchez. 2002.
-Sables y espadas de montar de Dragones. J.L. Calvo. Artículos. 2006
-Espada de montar con guarnición de barquilla con vela II. J.L.Calvó artículos.2006
-Armas Blancas Reglamentarias en la Fundación de la Real Fábrica de Toledo, los modelos de 1761. Juan José Pérez Rodríguez. Revista de Historia Militar. 2007